Digno de un cuento de Hernán Casciari o Eduardo Sacheri, el Reumosan FC fue bautizado así por las constantes lesiones de sus jugadores, la mayoría proveniente del equipo de futsal de Universidad Maza que antes había estado en Murialdo, pero que en sus inicios se habían probado en cancha de once. Un día les "pintó la idea de volver a jugar en los torneos de cancha grande" que se disputan los sábados pero todo dio un giro inesperado. Cuando estaban por debutar en el Torneo Quilmes, surgió la chance de sumarse a Boca de Bermejo para disputar la Liga Mendocina B. Meses más tarde, lograron el ascenso a Primera División. 

"Boca entrenaba con inferiores, tenían cuatro o cinco chicos en Primera. Eran de la cuarta división y no les convencía jugar en la categoría superior. Venían de descender con una campaña dura. Sacaron dos puntos en 19 fechas. El martes previo a debutar en el Torneo Quilmes, hablé con el Presidente y agarré de caradura. El viernes hicimos los carnets y con dos entrenamientos, el domingo estábamos debutando en cancha de Algarrobal por la fecha 1 de la Liga Mendocina B", explicó Matías D"Angelo, entrenador del equipo y parte clave en toda esta locura, en Aurora 91.3.

El arranque no fue fácil. "Perdimos los dos primeros partidos. El cambio se notó. Es otro entorno y también el tipo de juego. Las canchas del torneo amateur están buenas y las de Liga Mendocina B están muy malas. Controlar la pelota es otra cosa. Es un fútbol mas físico, con mas roce y fricción", agregó el entrenador.

Reumosán en épocas de fútbol amateur los sábados por la tarde.

D"Angelo cuenta que la mayoría de los integrantes del equipo son "gente grande, con pareja e hijos" y por ello no se sintió el cambio en la preparación. "Todos se lo tomaron con gran seriedad y notable profesionalismo dentro del contexto en el que desarrollamos el deporte". 

El equipo creció y obtuvo el ascenso a la Primera A de la Liga Mendocina. "No nos alcanzó para salir campeones pero alcanzamos el objetivo del ascenso. Fue todo muy loco porque dimos ventaja desde lo físico. Largamos los chicos a la cancha a ver qué pasaba, pero nos fuimos acomodando con el transcurso del torneo. Algarrobal ascendió directo y nosotros ganamos un cuadrangular con los que salieron del segundo al quinto lugar de la general".

Continuando con lo que tranquilamente podría ser un cuento de fútbol, la materia pendiente es jugar en la A, situación que la pandemia a nivel mundial y el aislamiento obligatorio todavía no permiten: "Debutábamos el domingo ante el CEC en Primera A, hicimos la práctica de fútbol el jueves y esa misma tarde llegó el comunicado suspendiendo las actividades por el coronavirus". 

"Llegamos a hacer una pretemporada de dos meses, nos ayudaron amigos con sponsors y facilitaron la lucha en lo económico. Se mantuvo la base del equipo, aunque perdimos algunos chicos por problemas de trabajo. Antes entrenábamos de noche (el método del futsal) porque se adaptaba a nuestros horarios, alquilábamos cancha porque en el club no tenemos luz. Eso nos hizo mas fuertes", dijo D"Angelo. 

El DT D"Angelo.

Pese a que el Reumosán FC es de un grupo de amigos, los roles en Boca de Bermejo se cumplen y quizás esa sea la razón del éxito alcanzado: "Yo les digo que son mis hermanos. Me ofrecí de caradura, pero ellos fueron los que me bancaron. Las decisiones son más difíciles, pero tengo que ponerme en el papel de técnico y ellos lo entienden", argumentó D"Angelo al aire.

Con respecto al futuro, la idea del técnico es crecer y capacitarse. "No pude hacer el curso el año pasado y este año me paró el Covid, pero pronto va a empezar online y lo voy a hacer, porque es necesario. Hoy no me veo dirigiendo otro equipo de la liga, es más un hobby que otra cosa. Me apasiona el fútbol pero no vivo de esto. Quizás mas adelante surja una nueva oportunidad".

Hincha de Boca desde que tiene uso de razón, también bromeó: "Si me llama Román, dos horas después cuando me despierte, le doy una respuesta", finalizó el DT.

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